La jibia es un calamar que habita exclusivamente en el océano Pacífico oriental, entre la superficie y los 1.200 m de profundidad. Es un depredador activo que se alimenta de peces, pequeños crustáceos y otros cefalópodos.
Actualmente la jibia se extrae exclusivamente mediante la “potera” o línea de mano que presenta muy pocas probabilidades de capturas accesorias y no genera ninguna interacción con los hábitats del fondo marino. Debido a la crisis de la merluza común esta especie se ha transformado en una gran alternativa para la pesca artesanal de la zona centro del país.